Víctor Martín Aragón, un artista comprometido en crear sinergias para dar voz a los pacientes
Nuestra responsable de Relaciones Institucionales dice de sí misma que es “muy abogada de pleitos pobres”. Las personas que conformamos Anasbabi Ciliopatías y su red asistencial Diversia 5.5 preferimos utilizar las palabras del poeta Mario de las Sagras para definir a Luisa Martín: “es una señal de neón de 25 metros”. Esa señal de neón iluminó el espíritu comprometido de ambos, marcando el inicio de colaboración solidaria que nos han regalado una maravillosa obra del joven de Leganés: Guerreros de las siete mil batallas. Cada verso en la voz de rostros muy cercanos a la sociedad ha permitido amplificar el siempre necesario mensaje reivindicativo de las familias que conviven con una o varias enfermedades raras, alertando de sus necesidades y retos. Esa señal de neón sigue siendo la mejor de las alarmas para sumar a la causa a otras muchas personas generosas y siempre dispuestas a decir sí. La primera de una larga lista que iremos conociendo: Víctor Martín Aragón.
Pero pongamos un poco de orden a la historia. El lunes presentamos en Cenlle el programa Vides con Alma, hecho realidad gracias a la implicación de los ayuntamientos de O Ribeiro. Nuestro presidente José Carlos Pumar desveló que en la Gala Solidaria que inaugurará este proyecto habría muchas sorpresas. Una de ellas, la presentación de un maravilloso trabajo de Víctor y que hoy hemos conocido.
Víctor recuerda que Luisa lo contactó “con la intención de hacer una canción en forma de colaboración con el poema de Mario Eme (Mario de las Sagras)”. Reconoce que no conocía el trabajo de nuestra asociación pero “durante todo el proceso hemos tenido muchas conversaciones con Luisa y ella se ha encargado de explicarnos todo de la mejor manera posible”. Y habla en plural porque, como ya adelantamos, Luisa ha implicado a mucha gente en esta lucha de dar voz a los pacientes de enfermedades raras.
Este trabajo incluye por ahora una canción, un poema y un video. “Ha sido un proceso precioso que, en mi opinión, tiene dos funciones”, indica Víctor Martín. “La primera, que se ha cumplido con éxito, es crear sinergias, colaboraciones y vínculos entre diferentes artistas desconocidos entre sí, a través del trabajo tan importante que realiza la asociación”, resaltando que el proyecto le ha permitido “conocer, colaborar y aprender de Luisa, Mario y Salomé (refiriéndose a la productora Salomé Limón) entre otros”. En cuanto a la segunda, es conseguir que esa emoción y colaboración que hemos mantenido en los últimos meses se transmita al resto del mundo y de verdad espero que así sea”. Nosotros ya adelantamos que estamos convencidos de que así será.
Unas líneas escritas no son la mejor forma de disfrutar de un trabajo musical, pero sí sirven para conocer un poco más a este joven que lleva el mundo del arte en su ADN. Parece ser que la primera vez que se subió a un escenario tenía tan sólo cuatro años. “Podría ser”, indica para añadir que tiene de aquel pasado tiene todo tipo de recuerdos: “Desde las risas y el disfrute más grande hasta los nervios y el miedo”. “No creo que haya mucha diferencia entre la vida y el escenario y por suerte los buenos recuerdos superan por muchísimo a los malos”, asevera.
Estudió Audiovisuales, llegó al mundo laboral con un trabajo que nada tenía que ver con este mundillo y al final eligió profesionalizar su pasión por la música y formarse en Berklee. “Mi familia y mis amigos siempre me han animado a que la musica forme parte de mi vida. Independientemente de ser mi profesión o no. La música me hace feliz y los que están a mi alrededor lo ven. La idea de Berklee siempre estuvo en el aire pero al salir del colegio decidí probar otras experiencias hasta que finalmente me quedó claro que tenía que dedicarme a la música”. Y siete años después, está seguro de haber tomado la decisión correcta.
Se habrán dado cuenta de que Aragón es su segundo apellido. Sí el de la famosa saga familiar que, a los que ya tenemos una edad, nos transporta a aquella televisión con poco color pero unos payasos que siempre nos recibían con un Cómo están ustedes. ¿Pesa llevar el apellido Aragón? , le pregunto. “Supongo que depende más de como te lo tomes que del apellido en sí mismo. En mi caso creo que sería difícil comparar mi trayectoria con la de otro familiar”, me responde.
Pero nuestro protagonista es él. El artista que además de talento viaja por la vida acompañado de una buena persona, dicen quienes lo conocen. Así que lo invito a repasar su trayectoria, hablar de proyectos futuros … “Desde que terminé la carrera han pasado muchas cosas muy diferentes entre sí y eso es lo que espero de mi futuro. He publicado un disco y medio, he girado por España, he compuesto canciones para un espectáculo de teatro musical que estrenó en el Price, he compuesto música para comerciales y he escrito canciones para grandes artistas y amigos tanto en España como en Latinoamérica”, cuenta. Ahora ha tenido la oportunidad de reinterpretar un poema de Mario Eme “para hacer una canción que tiene muy buenas intenciones”. “Sólo puedo esperar que sigan apareciendo proyectos y equipos tan buenos”, apostilla.
Aunque no cree que el artista y la persona sean muy diferentes, no cree “que esté mal crear un personaje o ponerse la careta de artista y quitársela al llegar a casa si eso te ayuda profesional o emocionalmente”. “Cuando he intentado algo parecido me he sentido raro, así que soy artista y persona por igual aunque suene un poco más aburrido. Me han dicho que eres un gran artista, pero mejor persona”, razona. “Yo diría que soy exactamente igual. Tanto dentro como fuera del escenario intento compartir un buen rato, crear un ambiente divertido y relajado y aprender todo lo posible”.
Quédense con su nombre y sigan su trayectoria, disfrutando de su trabajo. Pero además, quédense con el Víctor Martín Aragón comprometido. “Me alegra mucho haber formado parte de este proyecto. Durante todo el proceso, Luisa Martín se ha encargado de enseñarnos todo lo que pasa y de difundir el mensaje con la intención de que nosotros podamos hacer lo mismo y se lo agradezco de corazón”.
Y familias este último mensaje es para vosotros: “espero de verdad que nuestro pequeño trabajo ayude a conseguir los recursos y la concienciación tan necesaria a día de hoy”. “Gracias, tanto a las familias como a Luisa y a la asociación por enseñarme y dejarme participar”. Espera que llegue el momento en que no sea necesario invitar a cada uno/a de nosotro/as a aportar nuestro granito de arena para construir juntos una sociedad inclusiva. Mientras tanto ahí queda su invitación a la sociedad a contribuir para poder avanzar”.
Invitación trasladada. El broche a estas líneas es nuestro sincero reconocimiento al trabajo altruista de tanta gente que, siguiendo el camino solidario que marca esa luz de neón de 25 metros que es Luisa Martín, da voz a todo el que necesita ser escuchado porque precisa respuestas que lleven calidad a su vida. Somos pequeños pero comprometidos, y este es nuestro humilde reconocimiento a tu trabajo Víctor. Agradecidos de encontrarnos en el camino para recorrerlo juntos. Porque, como siempre decimos, Tú, Nosotros, Juntos hacemos magia.
Begoña María Fernández Barbosa, coordinadora Comunicación

Víctor Martín Aragón explica el proyecto musical realizado para Anasbabi